¿Clarín está involucrado en el escándalo de Michetti y Alonso?

Desde siempre las noticias del medio Clarín han sido moldeadas para responder a los intereses de los sectores políticos de la derecha, hoy en Argentina vinculados directamente con el modelo neoliberal, que llamativamente pregona la libertad de expresión como objetivo en si mismo, sin embargo, ante un escándalo de carácter nacional que involucra de manera directa a los medios, el Grand Diario Argentino, decidió guardar silencio, evidenciando los límites de sus principios liberales.

Al inicio de la semana, fueron difundidos por prácticamente todos los medios de comunicación de alcance nacional,  audios entre la exvicepresidenta, Gabriela Michetti y la extitular de la Oficina Anticorrupción (OA), Laura Alonso, en los que la entonces presidenta del Senado pedía limpiar el nombre de un 'amigo' que se encontró involucrado en una causa de corrupción investigado por el organismo nacional. La noticia lanzó la investigación de un grave delito aparentemente cometido por altas autoridades del gobierno de Mauricio Macri, pero el Grupo Clarín todavía no emitió palabra.

Es que la causa en cuestión involucra de forma directa a Clarín, que habría sido el medio utilizado por Alonso para difundir una denuncia por ''corrupción K'', aunque luego en los audios Michetti tuvo que marcarle el error y explicarle que  uno de los implicados  trabajaba para Juntos por el Cambio 

El medio en cuestión, responde firmemente y sin cuestionamientos a los intereses de los grupos de poder concentrados, cifrando en 0% la responsabilidad que conlleva ser un formador de opinión, aún así asiste siempre la posibilidad de que un medio puede cometer un error y reconocerlo, pero no. Clarín no subió la noticia, no publicó una sola línea de lo ocurrido, ni siquiera un comentario, hizo la vista gorda y se alejó del tema; y seguirá subiendo información modificada para cambiar la imagen de los "corruptos" a los que protegen o por lo menos esa parece ser la intención al omitir informa sobre este hecho de brutal gravedad institucional.

Posibles involucrados ademas de Clarín:

Pero eso no es todo, en la brevedad también se conocieron unos chats de la misma funcionaria, Laura Alonso, y el expresidente de la Nación, Mauricio Macri, organizando reuniones con lideres de medios en donde se aseguran propios beneficios.

En esas capturas es nombrado el dueño de un medio de comunicación al que Alonso se refiere como GH, lo que si bien no está confirmado, no deja mucho espacio a la imaginación. ¿GH? Gerardo Daniel Hadad, el dueño de Infobae, quien -no casualmente- también responde a los intereses de el sector en cuestión.

Aunque existe una alternativa: Un hombre que comparte las características de Hadad, y quien está enormemente vinculado a Maria Eugenia Vidal (dirigente del entramado de corruptos en cuestión),  Gabriel Hochbaum, un directivo de canal América.

De esta manera comienza a dislumbrarse, de manera muy obvia, el perturbador arreglo de la gestión de Cambiemos para con los medios de comunicación, que aceptaron -vaya a saber uno a cambio de qué- responder a ciegas las peticiones mediáticas de los dirigentes, para que no queden cabos de información sueltos y puedan manipular todas las causas judiciales y armados de corrupción a su antojo, como se está descubriendo; o al menos, esto es lo que el panorama esclarece.