Ex espías de la AFI admiten que trabajaron para Alex Campbell y Vidal 

El ex intendente de la ciudad de La Plata, Pablo Bruera, se presentó en el canal de noticias A24 para compartir algunos trascendidos del libro que publicó hace un año atrás: “En primera persona: Lawfare y persecución en democracia”, donde se sumaron algunos testimonios de ex espías de la AFI macrista. 

En una entrevista junto a los ex espías Leandro Araque y Emiliano Matta, el ex mandatario platense adelantó que escribirá la segunda parte de su libro gracias a las declaraciones de estas personas. 

En esa línea, Matta expresó que por órdenes directas del ex director de Operaciones de la AFI, Alan Ruiz, él había perseguido en formato de trabajo de campo a Bruera y al Obispo Jorge Lugones. 

“Nos decían que había que seguir a tal objetivo porque tenía una pre causa”, expresaron los ex agentes, y definieron: “Es un término muy usado en la AFI, donde nos daban sesenta días antes de judicializar formalmente una causa”; días que se utilizaban para investigar a las víctimas hasta conseguir alguna información que pueda utilizarse para acusarlos jurídicamente. 

Tanto Arque como Matta se desligaron de detalles puntuales, afirmando que ellos recibían la bajada de línea y accionaban según la información. “Averiguamos que había un interés político porque los informes que hacíamos llegaban a oficinas muy cerca de la de María Eugenia Vidal”, afirmaron. 

En la entrevista fue presentada también una imagen de cómo se hacían estos trabajos de campo, puntualmente la persecución al hermano del ex intendente en cuestión, quien resultó procesado por una causa armada; Mariano Bruera.

Los métodos de estos “trabajos de campo” que hacían los ex espías eran en base a seguir los “movimientos bancarios, fechas de entrada y salida del país, investigar a las familias”; y también seguirlos en la cotidianeidad para averiguar qué lugares frecuentaban y con quienes se reunían.

Los ex espías tenían órdenes políticas:

Los involucrados negaron haberse metido en los casos de forma individual, negando haber extorsionado o participar de coimas con los perseguidos. “No le pedimos plata a nadie, nosotros a fin de mes teníamos un sueldo”. Cuestión que se vincula directamente con el cuento de los cuentapropistas de la ex gobernadora. 

“A mi nunca me llamaron para extorsionarme, sino que buscaban meternos una causa política porque les molestaba nuestro movimiento”, aseguró Bruera, y agregó: “estos informes eran para el actual diputado del PRO, Alex Campbell, que los recibía en la Gobernación”. 

Asimismo, anunció que se iniciaron acciones penales contra funcionarios del gobierno de Vidal que pudieron ser identificados gracias a las declaraciones de estos ex espías. 

Respecto al rol de Araque y Matta, Bruera expresó: “No les guardo rencor porque ellos estaban trabajando y eran muy buenos en lo que hacían, la cadena no puede cortar acá porque ellos respondían a un jefe orgánico (Ruiz) y también a un jefe político (Campbell/Vidal)”. 

Además, estos ex espías de la AFI lamentaron que la gente es muy vulnerable, ya que “es muy fácil buscar algo que termine comprometiéndonos” buscando debajo de la alfombra. 

“Usaron inteligencia política para investigarnos y procesarnos ilegalmente”, agregó el ex jefe comunal, y sentenció: “Cuando nosotros denunciamos esto en su momento, sin toda esta información, el PRO completo se abroquelo diciendo que no tenían nada que ver, pero hay que aclarar que no son todos, obvio que no; son algunos del PRO”.