Circularis: La pyme que fabricará 100.000 durmientes con plástico reciclado

Tras participar de una licitación nacional convocada por el Ministerio de Transporte junto a más de 20 compañías, la empresa argentina Circularis fue seleccionada para fabricar 100.000 durmientes con 12.200 toneladas de plástico reciclado para reemplazar la madera de quebracho que se utiliza actualmente. Esta iniciativa, enmarcada dentro de la economía circular, no solo promueve la sostenibilidad ambiental, sino que también generará empleo y contribuirá al desarrollo industrial del país.

Franco Frola, gerente general de Circularis, habló este sábado con Frecuencia DLR, por Radio La Plata FM 90.9, sobre este proyecto sustentable que busca mejorar la infraestructura ferroviaria con materiales más duraderos y livianos, mientras promueve la conservación de 27.000 árboles de quebracho.

“La iniciativa de nuestra pyme pretende dar respuesta a la necesidad del ferrocarril de tener durmientes para su mantenimiento. El durmiente sintético que producimos reemplaza al durmiente de madera; no al de hormigón, que es el que se utiliza para vías nuevas. Argentina tiene, en su mayoría, vías de madera que requieren recambio y esto genera un problema por cuestiones ambientales, dada la falta de madera. Entonces el desarrollo de este proyecto brinda una solución al generar insumos”, explicó Frola.

Más adelante, el joven emprendedor cordobés se refirió a las ventajas de los durmientes sintéticos, al destacar que “más allá de lo ambiental, técnicamente tienen las mismas características que los de madera. Pero el plástico es más liviano, entonces el trabajo lo pueden hacer las mismas personas”. Mientras que sobre los durmientes de hormigón aclaró que “se necesita otro equipamiento, otra maquinaria”.

Consultado respecto a los puestos de trabajo que generará la inversión, Frola dijo: “El reciclaje en general tiene un componente muy importante en personal, y si bien nuestra planta tiene planificada para una primera etapa contratar a 45 personas, lo relevante serán los puestos de trabajo indirectos que estarán involucrados”.

“El proceso demandará el trabajo de cooperativas que clasifiquen, separen y descarten el material reciclado”, detalló, al tiempo que sostuvo que “hay algunos estudios que determinan que cada 2.000 kilos de plástico se crea un nuevo puesto de trabajo y nuestro proyecto lo que genera son más de 160 puestos mensuales, y eso a su vez tracciona dentro del sistema de recuperadores urbanos”.

En este contexto, donde la política de ambiente no es la antítesis del desarrollo industrial y producción, Flora remarcó: “El objetivo es que Argentina siga creciendo en políticas de economía circular, algo donde estábamos un poco retrasados. Pero estos proyectos van en camino de aportar valor agregado”.

Asimismo, Flora hizo hincapié en el impacto positivo en relación con la problemática de los basurales a cielo abierto de este tipo de iniciativas al asegurar que “los grandes generadores de basura, como las industrias, los municipios y las cooperativas, son para nosotros proveedores de insumos que tienen un valor económico dentro del sistema productivo”.

“Con Circularis buscamos concientizar a la sociedad para que empiece a separar más materiales y así generar beneficios al municipio, a la empresa y la cooperativa”, continuó.

Circularis es una pyme familiar que hace 10 años trabaja en el reciclaje de descartables textiles y plásticos con los que fabrica además bolsos, mochilas y distintos elementos de marroquinería. También realiza productos con madera recuperada de industrias y tetra.

“Hace mucho que venimos trabajando en dar alternativas de valor agregado para transformar esos mal llamados residuos, que en realidad son insumos. Y este proyecto de durmientes es el desafío más grande que hemos tenido”, finalizó.