Massa cerró la campaña: "El domingo decidimos si amamos nuestra bandera o no"

El candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, cerró su campaña electoral con un acto en una fábrica en el partido bonaerense de Pilar, junto a trabajadores, docentes y jubilados, apelando a los más profundo de la identidad peronista. "El domingo a la hora de votar definimos los próximos 4 años de la Argentina; decidimos por un país donde el que trabaja tenga derecho a la indemnización y vacaciones pagas o donde el que trabaja sea simplemente un esclavo que tratan como mercadería", alertó en relación a las propuestas del postulante de La Libertad Avanza, Javier Milei.

“Cuando me pidieron que dijera cómo queríamos cerrar la campaña, les dije que la quería cerrar en algún lugar que simbolizara el país en el que creemos. En una escuela, en una fábrica, en alguno de esos lugares que son símbolo de lo que yo quiero para la Argentina desde el 10 de diciembre. Y además quería que estuvieran los trabajadores, si eran en una fábrica; los maestros, si eran en una escuela, pero que quería sobre todas las cosas que estuviera expresada la comunidad”, comenzó el candidato. 

Y continuó: “Hace tres años estuve en este lugar cuando acá no había nada. Y cuando esto, que hoy es un proyecto industrial que exporta a siete países, era el sueño de una familia y de una empresa casi familiar que apostaba al trabajo argentino y al valor agregado en la Argentina. Capital y trabajo. Empresas y trabajadores. Esa es la Argentina que tenemos que construir”. 

Acto seguido, el postulante a la presidencia agregó: “Yo no soy un hijo de una familia política. Soy hijo de una familia de inmigrantes. Mi viejo y mi vieja vinieron los dos de Italia de muy chiquitos escapando de la guerra. Soy un hijo de la clase media argentina. De esa clase media que, entre las pymes y los laburantes, mueve todos los días este país”.

Más tarde reiteró su crítica a Javier Milei al asegurar: “Me enoja mucho cuando escucho a quienes quieren gobernar la Argentina decir que somos un país de mierda. Somos un país maravilloso, que lo que necesita es ponerse de acuerdo”.

Y realizando una fuerte autocrítica subrayó: “Tenemos que promover el trabajo y ayudar a aquellos que están en la economía popular o en el trabajo informal, porque el Estado los abandonó (...) Tenemos que mejorar salarios y mejorar el poder de compra, porque el Estado no tuvo lugar firme y presente en la puja distributiva”. 

Tras recorrer los puntos principales de su plataforma de gobierno, el hombre de Tigre fue categórico: “El domingo a la hora de votar definimos los próximos 4 años de la Argentina; decidimos por un país donde el que trabaja tenga derecho a la indemnización y vacaciones pagas o donde el que trabaja sea simplemente un esclavo que tratan como mercadería”. 

“Decidimos si tenemos un sistema de educación que mejore y abrace a nuestros pibes, que sea gratuito, o si vamos al país donde solamente pueden educarse los que tienen plata. El domingo decidimos si construimos un país federal con una mirada de Nación o si abandonamos a la buena de Dios a las provincias”, prosiguió.

“Quiero decirles lo mismo que he dicho una y otra vez a lo largo de esta campaña. Si mañana muriera y tuviera que volver a nacer, y tuviera que elegir dónde nacer después de ver lo que esta gran patria le dio a mis viejos escapando de la guerra volvería a elegir a Argentina una y cien veces. ¡Viva la patria! ¡El domingo, cueste lo que cueste!”, cerró.