Relación Argentina-China: Un hipótetico gobierno de Milei y un análisis de la gestión de Fernández

Las elecciones generales del 22 de octubre, en la que argentinos y argentinas comenzaron a decidir los gobernantes para los próximos 4 años, dejó tantas certezas como incertidumbres. Si bien a niveles municipales y provinciales los candidatos ya fueron electos, para el nivel nacional todavía queda un partido importante, el balotaje. 

El 19 de noviembre, Sergio Massa (UxP) y Javier MIlei (LLA) disputarán la presidencia de la República Argentina. Debido a esto, son muchas las incertidumbres que hay  en torno a varios temas, entre ellos, la política y el rol internacional que jugará la Argentina, a partir del 2024. Francisco Taiana, historiador y sinólogo (estudio de la lengua, la literatura y las instituciones de China) y autor del libro “Argentina, China y el mundo (1945-2022), dialogó con De Gira Mundial en Radio La Plata, para realizar un análisis de lo que rumbos podría tomar esta relación dependiendo del resultado del balotaje.

En primera instancia, Francisco hizo una breve introducción a modo de análisis del momento turbulento que se encuentra atravesando el país: “Se va perfilando un escenario que vengo sosteniendo desde el día después de las PASO. Las PASO siempre es un termómetro social raro porque al ser una elección primaria pero a la vez obligatoria, otorga resultados bastante distorsionados y sus efectos en la elección general no están muy estudiados porque no hace tanto tiempo que existen”. 

“Por eso es que la idea de un Mieli imparable que ganaba en primera vuelta era un tanto distorsionada. En eso me parece que Massa es un candidato mucho más sólido, más amplio y capaz de convocar a espacios mucho más diversos de la sociedad”, añadió.

En ese sentido, también advirtió: “Milei tenía este difícil dilema, tan común para un político, que es no continuar haciendo lo que le ha resultado favorable en el pasado. Su estilo tan estrambótico, polémico y agresivo fue justamente lo que lo llevó a un resultado extraordinario en las PASO pero también eso que lo había llevado tan lejos es su propio límite”. 

“Si bien lograba captar las frustraciones de distintos espectros de la sociedad, a la vez generó un rechazo más fuerte y hemos visto un poco las limitaciones de esa estrategia, que en los últimos días colapsó en lo absoluto con movimientos espasmódicos y torpes que realmente generan muchas dudas entre sus propias bases. Un candidato que se construyó siendo inclemente, taxativo, apegado a su versión de la verdad, alejado y contrapuesto a la ‘vieja política’ y que ahora, en un margen de 72 horas, disolvió esas posturas”, concluyó.

Relacion con Chica bajo un posible mandato de Milei 

A la hora de hacer futurología, Francisco brindó un análisis de cómo podría funcionar la relación Argentina-China, en un eventual gobierno libertario. “Antes de lo visto esta semana, ya era cuestionable si las declaraciones de Milei podían ser tomadas en términos literales. Como cuando habló de romper relaciones con China, demoler el banco central o dolarizar la economía. Estos tres días mostró una fragilidad en esas posturas tan taxativas por lo que a mí, no me queda ninguna duda de que sería absolutamente incapaz de romper realmente relaciones con la República de China, nuestro segundo socio comercial y la segunda economía más grande del mundo”, explicó. 

En ese sentido, también añadió: “Dicho eso, razonablemente las relaciones con China podrían sufrir un daño significativo, no tanto porque Milei lleve adelante una ruptura, sino porque al ser un hombre abiertamente volátil y con poca experiencia en el juego diplomático y geopolítico, es muy probable que con o sin intencionalidad termine cruzando algunas líneas rojas diplomáticas de Beijing”. 

“Dicho esto, yo me pasé 7 años escribiendo un libro cuyo argumento principal es que las relaciones entre China y Argentina no dependen de individuos, ni de políticas, ni de gobiernos ni de sistemas de gobierno y el ejemplo más claro para recordar es que el primer presidente argentino en visitar China fue Jorge Rafael Videla en 1980, al que se le puede acusar de muchas cosas pero no de socialista”, agregó.

Los 4 años de Alberto en el poder

Aparte, fue el turno de realizar un análisis con lo que respecta la política exterior, del gobierno que finalizará el 10 de diciembre: “La explicación de la dinámica no tienen tanto que ver con los individuos o en los sistemas de gobierno, sino en que sus raíces se encuentran en la conformación del sistema internacional actual. Un sistema que se consolidó en 1945 al terminar la Segunda Guerra Mundial. Es un sistema que le da incentivos estructurales tanto a China como a Argentina, para encontrar el uno en el otro a socios no tradicionales con quienes multiplicar sus opciones diplomáticas y con eso aumentar su capacidad de maniobra en el escenario internacional”.

“De hecho mi libro comienza en 1945 porque ese año fue la primera vez que la Argentina estableció relaciones con un gobierno chino al enviar a su embajador. Lo primero que negocia Argentina es que la República de China que estaba ingresando como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las futuras Naciones Unidas, apoye el ingreso de Argentina como miembro permanente, algo que tanto Estados Unidos y particularmente la Unión Soviética estaban muy dispuestos a bloquear para castigar la neutralidad argentina durante la segunda guerra", añadió. 

“Yendo particularmente al caso de Alberto Fernandez, ha tenido 4 años muy movidos en términos políticos. Tuvimos la pandemia, cuyo origen en China llevó a un impacto sobre la imágen de China en el mundo, de hecho hubo una oleada de ataques a persona étnicamente asiáticas en Estados Unidos en el 2020; estuvo y sigue estando la guerra en Ucrania y una Argentina que está ligando con un préstamo importante del FMI, lo cual condiciona su margen de maniobra”, manifestó. 

En esa misma línea, sentenció: “A pesar de eso, las relaciones con China se profundizaron y ahora se presenta la posibilidad de que Argentina ingrese al BRICS, un espacio multilateral con países muy importantes, como nuestros dos socios comerciales más, Brasil y China y, también con potencias regionales y futuras grandes potencias globales como La India, país que ya es la quinta economía del mundo”. 

“Por eso me parece que el gobierno de Alberto Fernandez ha tenido una política muy buena con respecto a China en un contexto geopolítico bastante tenso”, finalizó.