Crimen de Tomás Tello: Los detenidos se niegan a declarar

En una jornada de indagatorias que se extendió hasta altas horas de la madrugada, los ocho mayores de edad detenidos por el asesinato de Tomás Tello, el joven de 18 años apuñalado en el balneario de Santa Teresita durante la celebración de Año Nuevo, optaron por no brindar declaración ante el fiscal del caso, Pablo Gamaleri, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 11 de Mar de Ajó. Entre los acusados se encuentra Damián Kopelian, alias "El Kope", señalado como el presunto autor material del crimen.

Los ocho detenidos están imputados por el delito de "homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas", una calificación legal similar a la utilizada en el caso del crimen de Fernando Báez Sosa en enero de 2020 en Villa Gesell.

Dos menores de edad, también detenidos en relación con el caso, se negaron a declarar ante el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil en la ciudad de Dolores, cabecera del Departamento Judicial.

La madre de la víctima, Samanta Ferreyra, quien se encuentra a cinco días de dar a luz a su tercera hija mujer, tiene programada su declaración testimonial para el mediodía de este miércoles. Hasta el momento, cerca de veinte testigos han aportado sus declaraciones al expediente, incluyendo personal médico que asistió a Tello tras el ataque y efectivos policiales involucrados en la detención de los acusados.

La fiscalía, basándose en la información recopilada en la investigación, solicitó a la Justicia de Garantías la conversión en detención de las aprehensiones realizadas. Según el fiscal, el ataque contra Tello tuvo lugar a las 7:10 del 1 de enero en la zona de playas de Costanera y calle 38. Damián Kopelian y al menos otros tres hombres, identificados como Federico Brandon, Roberto de Jesús Ochoa y Carlos Amestoy, están imputados como coautores en el crimen.

La agresión se originó a raíz de una disputa previa ocurrida el 23 de diciembre de 2023, según la fiscalía. Los acusados increparon a Tello en la playa mientras él estaba con su novia y un amigo, utilizando expresiones amenazantes. Se afirma que al menos uno de los agresores portaba un arma blanca. Tello intentó escapar, pero fue perseguido durante seis cuadras y finalmente atacado en el porche de una vivienda en la calle 44.

"Acorralaron a la víctima en el pasillo de entrada de la vivienda y se turnaron para atacarlo a golpes de puntapiés, puños, piedras y botellazos", describe el fiscal. El ataque culminó con una herida fatal corto punzante en el esternón con un arma blanca, atribuida al principal acusado, Damián Kopelian.

La autopsia determinó que Tello falleció a causa de una laceración en la aurícula derecha del corazón tras sufrir una herida punzocortante en la línea media del tórax. Tras el ataque, los acusados fueron detenidos gracias a testimonios y la identificación a través de cámaras de seguridad mientras intentaban escapar de la escena del crimen.

Los restos de Tomás Tello fueron inhumados el pasado martes en el cementerio municipal de Mar de Ajó, en una emotiva caravana que acompañó el traslado desde una sala velatoria en Santa Teresita. La investigación continúa, y la sociedad espera respuestas sobre los motivos y circunstancias que rodearon este trágico suceso.