El gobierno usó una cuenta oficial para difundir una "lista negra" de Legisladores

La inesperada derrota del gobierno nacional en el tratamiento de la Ley Ómnibus desnudó un brutal grado de improvisación en el manejo legislativo de La Libertad Avanza y evidenció la mirada absolutista del presidente Javier Milei, que se niega a negociar con los bloques opositores y las provincias para avanzar con el proyecto.

Levantada la sesión, muchos dirigentes salieron con los tapones de punta contra los gobernadores a los que acusaron de incumplir los acuerdos y desde la cuenta de X de la Oficina del Presidente, órgano de difusión oficial elegido por Milei, difundieron una especie de "lista negra", mencionando a cada uno de los diputados que rechazaron algún punto de la Ley.

La Oficina del Presidente agradece el compromiso legislativo del bloque Frente PRO, encabezado por Cristian Ritondo, del diputado Miguel Ángel Pichetto, y del sector de la UCR que acompañó el proyecto, así como a todos los diputados que este martes votaron a favor en particular…

— Oficina del Presidente (@OPRArgentina) February 7, 2024

La oficina del Presidente "destaca la traición a sus votantes por parte de todos los bloques que le dieron la espalda a sus promesas de campaña por una Argentina distinta. El pueblo jamás olvidará los nombres de aquellos que, pudiendo facilitar las reformas que fueron elegidas por el 56% de los argentinos, decidieron seguir haciéndole el juego a la casta", dice el mensaje, sin mencionar que el proyecto fue aprobado en general y el gobierno tuvo dificultades para lograr los votos para el tratamiento en particular.

El comunicado reconoce además "el compromiso legislativo del bloque Frente PRO, encabezado por Cristian Ritondo, del diputado Miguel Ángel Pichetto, y del sector de la UCR que acompañó el proyecto", y luego comparte el listado con los nombres de los diputados que votaron "a favor del pueblo" acompañando el expediente del oficialismo y aquellos que votaron "en contra del pueblo" al rechazarlo, aunque muchos de los que se mencionan sí levantaron su mano para que la Ley se apruebe en general.

Lo llamativo de este "escrache" es que se difundió desde una cuenta oficial, que además se convierte en exégeta de los lineamientos políticos de los bloques opositores y asegura que al no votar la Ley "le dieron la espalda a sus promesas de campaña".

Está claro que el oficialismo interpreta el aval obtenido en las urnas en la segunda vuelta, no como un elemento de legitimidad, sino como un cheque en blanco que le permitiría pasar por encima a las instituciones de la democracia como el Congreso Nacional, amparado en la idea de que "el pueblo votó un cambio" y los diputados y senadores de todos los espacios deberían acatar ese mandato.

Milei repite cada vez que puede que las reformas "no son negociables", cerrando toda posibilidad de diálogo con legisladores y gobernadores. La mirada totalitaria que expone el gobierno deriva necesariamente en denuncias, aprietes y acuerdos no del todo claros con algunos mandatarios provinciales en un intento de "imponer" lo que no tienen capacidad de negociar.

Ahora la aparición de esta lista negra expone nuevamente la mirada de La Libertad Avanza, mientras se multiplican los rumores de un llamado a consulta popular sobre las reformas que se quedaron a mitad de camino, una decisión bastante temeraria en momentos en los que la economía solo le trae malas noticias al ejecutivo, pero que se empieza a convertir quizá en la única opción, ya que es de suponer que será muy difícil que los diputados escrachados por el gobierno puedan volver a acompañar el proyecto original.

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