“Frenen porque lo van a matar” fue una de las frases que escuchó Nicolás, de 24 años cuando fue atacado a golpes de puño y patadas en la localidad bonaerense de Nueve de Julio por casi 20 personas de entre 17 y 18 años.
Luego de discutir con la madre de su hijo, este sábado Nicolás comenzó a recibir amenazas por sus redes sociales de otro joven de la ciudad: “Yo le pregunté cual era el problema, no me contestó mas y al rato me manda otro del grupo de amigos también amanezandome”, informó a este medio.
En la madrugada del domingo, vuelve a recibir amenazas y les preguntó “si querían charlar, porque no me gusta no poder estar tranquilo en la calle”.
En el momento del encuentro, Nicolás estaba enfrente de un vacunatorio de PBA y señaló que desde una camioneta le hicieron señas para que vaya. El ataque se produjo en las calles Edisón y San Martín de dicha localidad.
“Cuando estoy llegando eran dos camionetas y un auto, entre 15 y 20 personas entre 17 y 18 años. Dentro del grupo estaba el hermano de la madre de mi hijo”, informó y agregó: “Les pregunté por que venían, me empezaron a insultar y les pregunté quién tenía problema conmigo. Me querían agarrar, me empezaron a tirar trompadas, me puse en guardia pero llegó un momento que no pude zafar, me tiraron al piso y me empezaron a dar patadas, rodillazos, trompadas”.
La victima asegura que los golpes duraron “entre 15 y 20 minutos” y que “dos personas intentaron frenar los golpes pero era muy difícil porque eran muchos”.
“Desde el primer momento yo pensé que podía terminar muy mal, por eso no me quedó otra que aguantar y ponerme en guardia. Me golpearon en la cien, tengo las orejas hinchadas de los golpes”, señaló y luego recordó: “Uno de ellos les advertía a los amigos que me podían matar y no aflojaban”.
Por último, sostuvo que “el hecho fue organizado, ninguno se acercó a pedirme a disculpas”.
El caso de Nueve de Julio nos recuerda al crimen de Villa Gesell, cuando Fernando Báez Sosa, quién estaba por cumplir 19 años, fue asesinado a golpes de puños y patadas al ser atacado cerca de las 4.40 del pasado 18 de enero, por un grupo de jóvenes frente al boliche “Le Brique”.
En varias filmaciones hechas por testigos quedó registrado cómo Fernando estaba inerte sobre la vereda y varios muchachos continuaban con los golpes y las patadas en la cabeza, lo mismo que le sucedió a Nicolás.
Fran
8 de septiembre, 2021 at 01:24
También pueden contar como nunca se hizo cargo de su hijo o de todas las mujeres que golpio durante años
Paula
14 de septiembre, 2021 at 19:30
Nada tiene que ver la relación con su hijo, nada justifica semejante golpiza. En todo caso ese reclamo se resuelve en la justicia solicitando cuota alimentaria o lo que sea menester.
El acto que cometieron todos los que golpearon a una sola persona y siguieron aún con esta en el piso, es de una cobardía enorme. Habla muy mal de todos ellos ese comportamiento. Debería darles mucha vergüenza un acto tan ruin.
Y que ninguno se haga responsable por semejante actitud amerita que la justicia tome cartas en el asusto actuando de oficio y llevando el caso hasta las últimas consecuencias. Esto no puede ocurrir, no debe ocurrir.