Desde el Observatorio Electoral consideraron transparentes las elecciones platenses

El Observatorio de Estudios Electorales de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) certificó el fallo de la Justicia Electoral de ayer, que dictaminó que el recuento de votos en la apertura de urnas solicitada por el saliente intendente platense Julio Garro, no modifcaban el escrutinio provisorio, dando como ganador a Julio Alak.

Para eso, Código Baires dialogó con Sebastián López Calendino, intengrante del Observatorio Electoral, quien confirmó que no hay irregularidades en la elección, y aseguró que "es normal" que ocurran episodios de este tipo en una elección tan ajustada como la de La Plata.

Sugirió que situaciones como estas pueden ocurrir "cuando un presidente de mesa, generalmente con falta de capacitación, en lugar de poner las boletas en las urnas las pone en la bolsa de residuos", y aseguró que "no es la primera vez que pasa.

Para estas eventualidades, afirmó, está estipulado en el Artículo 114 del Código Electoral de la Nación que "cuando se habla de la declaración de la nulidad de la urna, lo primero que se mira, más allá de si están o no las boletas, es si está el acta de escrutinio y si fue firmada por los fiscales y el presidente de mesa. Ese es el documento que tiene mayor validez", contó Calendino.

"Si la cantidad de firmas y el resultado de esa mesa es compatible con la cantidad de sufragantes que hay en esa mesa, y no da un resultado demasiado diferente a la de al lado en la misma escuela, hay muchísimas posibilidades de que se trate de un error involuntario del presidente de mesa de poner las boletas en otro lado", agregó.

Calendino insitió con que se trató de "errores involuntarios", en dos mesas de más de 38 mil que hubo en la Provincia de Buenos Aires: "Muchas veces los presidentes de mesa se olvidan de firmar el acta o de que firmen los fiscales, y para eso están esta significtativa cantidad de controles para detectar estas inconcistencias", agregó como opción. 

Además, sostuvo que el Código Electoral Nacional tiene un plazo que establece que 48 horas después del cierre de la elección vence el plazo de los partidos políticos para pedir que se abran las urnas, y que, si cuando se va a ver el acta de escrutinio, esta es consistente con la cantidad de votos que tiene la mesa y el resultado de la elección, se da por válida.

Para modificarlo, señaló Calendino, "habría que cambiar el código electoral, instalar el escrutinio definitivo y eliminar el escrutinio provisorio", en donde una Junta Electoral se encargue del recuento de votos, como ocurre en algunos países como el Reino Unido, y no que este esté en manos de los fiscales de mesa, sostuvo.